La actividad se inicia con un viaje en vehículo hasta las cercanías de Portería Laguna Amarga o Portería Sarmiento. Desde aquí se sigue a un sendero atravesando el “restaurant del puma”, una zona donde este felino realiza sus cacerías. Las posibilidades de ver un puma durante el día son muy bajas, sin embargo nos encontraremos con manadas de guanacos pastoreando a ambos lados del sendero, y también podremos observar zorros, cóndores y ñandúes.
A mitad de la travesía, hay una enorme y sobresaliente formación rocosa donde los primeros pueblos cazadores y recolectores dejaron pinturas rupestres en sus paredes hace unos 7.000 años. Esta gran roca sedimentaria tiene una elevación considerable, que nos permite tener una amplia vista de las montañas y del terreno que la rodea.
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